Alerta en el turismo: gremios plantean cierre temporal de Machu Picchu por crisis en su gestión
El principal atractivo turístico del Perú vuelve a estar en el centro de la discusión. Gremios y representantes del sector han propuesto un cierre temporal de Machu Picchu con el fin de implementar una reestructuración integral y crear una autoridad autónoma que garantice la sostenibilidad del sitio arqueológico.
Fernando Santoyo, presidente de la Cámara de Comercio de Cusco, indicó que la clausura “podría durar una semana, dos semanas o el tiempo que sea necesario” para resolver la crisis de gestión.
Sin embargo, la medida tendría un alto costo económico: se estima que las pérdidas diarias serían millonarias, afectando no solo a operadores turísticos y agencias de viaje, sino también a restaurantes, hoteles, transportistas y guías locales.
El último paro en la zona ya evidenció la magnitud del problema, dejando a miles de visitantes sin acceso y a más de 100 mil personas que dependen del turismo gravemente afectadas.
El dilema es claro: ¿cómo equilibrar la urgencia de una gestión sostenible con el impacto inmediato en la economía regional?
La discusión sobre Machu Picchu pone sobre la mesa un tema clave para el país: la necesidad de encontrar un modelo de administración que proteja el patrimonio, asegure la experiencia de los visitantes y, al mismo tiempo, sostenga a las comunidades que dependen del turismo.
