John Murillo, Chief Business Officer de B2BROKER, un proveedor global de soluciones fintech para instituciones financieras

Esta semana destacó nuevamente Brasil, marcando el ritmo. El gobierno emitió 1.250 millones de dólares en nuevos bonos a 30 años con un rendimiento del 7,5%. No se trató solo de recaudar fondos, sino también de garantizar acceso a la liquidez global. Más importante aún, reabre el camino para que las empresas emitan a costos más bajos. Ese flujo es lo que refleja resiliencia, y Brasil está asegurando que se mantenga constante.
Las acciones se movieron lateralmente pero permanecieron cerca de máximos históricos, apoyadas por flujos extranjeros. Esto refleja confianza en la combinación de políticas de Brasil, incluso cuando los aranceles afectan las exportaciones. Los precios más firmes del mineral de hierro y el plan de inversión de 12.000 millones de dólares de Vale dieron impulso, mientras que la caída del petróleo moderó el apoyo más amplio de las materias primas. A nivel local, el rendimiento a 10 años subió y los CDS se ajustaron, mostrando cómo la presión de la oferta coexiste con la demanda de los inversores.
México envió un mensaje más silencioso pero importante. El IPC avanzó mientras la curva se relajó. El plan de la Bolsa para listar opciones sobre acciones tecnológicas de EE. EE. UU. más adelante este año es fundamental. Amplía las herramientas de cobertura, reduce la fuga de capitales y profundiza la colateralización en pesos. Combinado con un peso estable, México sigue siendo uno de los perfiles de riesgo más equilibrados de la región. Las subastas se resolvieron sin problemas y los spreads de CDS se ajustaron, confirmando una demanda estable.
Argentina estabilizó el peso dentro del rango de 1.000-1.400, incluso cuando aumentó la presión política antes de las elecciones provinciales. La reducción de la brecha entre el tipo oficial y el paralelo representa un logro notable. La inflación se desaceleró hacia la zona media del 30% interanual, aunque los precios más bajos de la soja recortaron los ingresos por exportaciones. Los rendimientos de las LECAP por encima del 40% siguen imponiendo una carga pesada.
Colombia también se destacó. El peso se fortaleció y el COLCAP avanzó, extendiendo su repunte. Este desempeño superior es notable pero estirado, ya que la caída del petróleo reduce el espacio fiscal incluso cuando alivia la presión inflacionaria.
De cara a la próxima semana, llegan los datos de IPC en México, Argentina y Brasil, la decisión de recorte de tasas en Chile, el calendario de emisión de bonos de Brasil y las elecciones en Santa Cruz, Argentina. Lo más probable es que se confirme la tendencia desinflacionaria, lo que debería mantener los flujos de liquidez en la región. Pero las expectativas son altas y el umbral para sorpresas positivas está aumentando.