Globalsat Group resalta el rol de la tecnología satelital en la masificación de IIoT

Aunque el concepto de Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) está más vinculado al ámbito cotidiano y ha experimentado un desarrollo más amplio que el Internet Industrial de las Cosas (IIoT), ambos términos comparten el objetivo esencial de conectar dispositivos a Internet mediante tecnologías como sensores, conectividad y plataformas en la nube, entre otros.
Sin embargo, cada uno de ellos se orienta a distintos públicos y mercados. Mientras el IoT implica una transformación disruptiva en múltiples sectores —como el consumo, el ámbito empresarial, la salud o el gobierno— el IIoT se centra en las necesidades específicas del entorno industrial y sus aplicaciones especializadas.
Silvina Graziadio, VP de Marketing de Globalsat Group, sostiene que en la actualidad la tecnología satelital está contribuyendo a que IIoT se expanda a una velocidad más rápida, beneficiando a diversos sectores productivos, muchos de los cuales operan en zonas remotas o aisladas, tales como minería, petróleo, gas y acuicultura.
A través de los productos y servicios satelitales, agrega, en estas áreas productivas es factible recopilar y aprovechar información generada por maquinarias y equipos en terreno, con el objetivo de optimizar los procesos, aumentar la seguridad y eficiencia, y fortalecer el desarrollo de los negocios.
“El éxito de una red de sensores depende en gran medida de contar con una tecnología de comunicación eficiente, que permita supervisar en tiempo real activos, dispositivos y maquinarias. Esta capacidad de recolectar datos facilita un control más preciso del negocio a lo largo del tiempo, e incluso posibilita acceder a información con valor predictivo”, destaca Silvina Graziadio.
En este sentido, señala que la incorporación de tecnologías Direct-to-Device (D2D) está comenzando a transformar la conectividad industrial al permitir la transmisión de datos satelitales directamente a dispositivos estándar, eliminando la necesidad de hardware adicional en ciertas aplicaciones.
Adicionalmente, menciona que la tecnología satelital es fundamental para habilitar soluciones de IIoT en cualquier lugar del mundo, ya que es la única capaz de operar en zonas remotas, se implementa rápidamente y ofrece una cobertura extensa que otras tecnologías no pueden igualar.
“Gracias a la digitalización de procesos mediante IIoT con conectividad satelital, algunos de nuestros clientes han reportado reducciones de hasta un 30% en costos operativos relacionados con logística, mantenimiento o consumo energético”, comenta.
Un caso destacado es el de VLI Logística, donde la implementación de una solución IIoT con conectividad híbrida permitió digitalizar flujos de monitoreo en rutas ferroviarias remotas, mejorando los tiempos de respuesta y reduciendo costos operativos.
En el caso de Rumo Logística, la solución híbrida satelital + LTE implementada junto a Globalsat Group permitió optimizar la continuidad operativa en zonas rurales, generando importantes ahorros en mantenimiento preventivo y mejoras en la eficiencia del despacho ferroviario.
Respecto de las características de IIoT, la ejecutiva destaca las siguientes:
Automatización. Las soluciones de IIoT deben ser capaces de adaptarse a distintos niveles de autonomía, ser programables y permitir su integración tanto con sistemas de ejecución de manufactura actuales como con plataformas heredadas.
Escalabilidad. Es esencial que estas soluciones puedan expandirse fácilmente, permitiendo la incorporación fluida de miles de sensores, dispositivos y controladores adicionales.
Interoperabilidad. Las soluciones de IIoT deben estar diseñadas para integrarse sin inconvenientes, ser compatibles con diversos protocolos y tipos de datos, y operar eficazmente junto con otros sistemas industriales.
Seguridad. Una característica distintiva de las soluciones IIoT radica en que emplean medidas de seguridad avanzadas, incluyendo autenticación, cifrado, arquitecturas robustas y sistemas de detección de amenazas.
Fiabilidad. Deben asegurar un funcionamiento continuo y estable, incluso bajo cargas intensas y en entornos con alta demanda operativa.
Baja latencia. Es fundamental que estas soluciones puedan identificar anomalías y aplicar respuestas correctivas con una latencia mínima, casi en tiempo real.
Facilidad de mantenimiento. En entornos industriales, las soluciones de IIoT deben ser fácilmente reparables para garantizar un rendimiento constante y minimizar los tiempos de inactividad.
Resiliencia. En aplicaciones críticas, las soluciones de IIoT deben estar diseñadas con mecanismos que permitan tolerancia a fallos y aseguren su continuidad operativa ante imprevistos.