CIP propone reabrir el antiguo Jorge Chávez para descongestionar nuevo terminal y recuperar funcionalidad nacional

El decano nacional del Colegio de Ingenieros del Perú, CIP, Ing. Jaime Ruiz Béjar, exhortó al gobierno a revisar las cláusulas de la concesión actual del aeropuerto y replantear los intereses detrás de la infraestructura aeroportuaria nacional. “La reapertura del antiguo terminal es una medida viable, técnica y necesaria para mejorar la experiencia del viajero y el desarrollo aeroportuario del Perú.
A su vez, el vocero del CIP, Ing. Luis Morán, propuso que el antiguo terminal del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, sea rehabilitado para atender nuevamente a pasajeros nacionales e internacionales, a fin de descongestionar el nuevo edificio y dar una solución eficiente y viable al creciente flujo de viajeros. “El Perú tiene el potencial de ser un hub para múltiples aerolíneas, no solo para labores de mantenimiento”, puntualizó.
“Tenemos un moderno terminal, sí, pero también una altísima densidad de personas porque toda la atención está concentrada en un solo punto. Reabrir el antiguo terminal, que no estaba colapsado y podía haberse reacondicionado, permitiría un sistema aeroportuario digno de una ciudad moderna”, sostuvo el ingeniero.
El Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) ha anunciado que evalúa reabrir el terminal cerrado el 1 de julio, proyectando una conexión entre ambos edificios mediante un monorriel y una atención estimada de hasta 60 millones de pasajeros anuales. El titular del MTC, César Sandoval, dijo que ya se ha planteado la propuesta a la presidenta de la República, y que las conversaciones con la concesionaria Lima Airport Partners (LAP) se iniciarán próximamente. El objetivo sería implementar un sistema de “terminal 1 y terminal 2” que responda a la realidad actual del transporte aéreo nacional e internacional.
Para el CIP, esta decisión no solo es técnica, sino estratégica. El Ing. Morán advirtió que “el aeropuerto antiguo, que solo el año pasado movilizó 24 millones de pasajeros, se convertirá en un hub logístico y taller de mantenimiento, lo cual refleja una decisión orientada más al beneficio empresarial que al interés del país”. Además, recordó que países como Panamá, Bogotá, Santiago o Argentina, operan con mangas modernas, mientras que en Lima algunos pasajeros siguen siendo trasladados en buses hacia las aeronaves, lo que evidencia un retroceso operativo.