Entre el 30% y 40% de los viajeros corporativos en Lima combinan trabajo y ocio: el auge del turismo Bleisure

- El viajero corporativo ya no se conforma con una agenda de reuniones: cada vez son más quienes extienden su estadía para conocer y disfrutar la ciudad.
- La evolución del turismo corporativo impulsa a los hoteles a ofrecer experiencias más flexibles, personalizadas y conectadas con el estilo de vida del viajero actual.
En un contexto donde el equilibrio entre productividad y bienestar cobra mayor relevancia, una tendencia viene ganando espacio en el turismo corporativo: el Bleisure, concepto que une “business” (negocios) y “leisure” (ocio). Cada vez más ejecutivos que viajan por trabajo están optando por extender su estadía para disfrutar del destino, y Lima no es la excepción.
Esta práctica está transformando los hábitos de consumo del viajero corporativo y, en consecuencia, la oferta de servicios en el sector hotelero. Datos recientes de hoteles como The Westin Lima y AC Hotel Lima Miraflores, reconocidos hoteles de la capital, revelan que aproximadamente el 40% de sus huéspedes anuales provienen del segmento corporativo, siendo los sectores más representados banca, consultoría, tecnología, retail y organismos diplomáticos. La mayoría de estos visitantes provienen de Norteamérica y Sudamérica.
Una agenda que se amplía: de reuniones a experiencias
En promedio, una estadía por negocios en Lima dura entre dos y tres noches. Sin embargo, cuando el motivo se extiende por ocio, ese tiempo se incrementa hasta a cuatro noches. Esto refleja un cambio en las prioridades: ya no se trata solo de cerrar acuerdos o asistir a eventos corporativos, sino de aprovechar la oportunidad para conocer la ciudad, disfrutar de su gastronomía, relajarse o explorar su cultura.
Por ello, los hoteles han empezado a ofrecer servicios que acompañan esta transición. Desde habitaciones con vistas privilegiadas y acceso a clubes ejecutivos, hasta guías de viaje según el perfil de cada huésped y equipos de conserjería que facilitan recomendaciones personalizadas para recorrer la ciudad, todo apunta a enriquecer la experiencia del viajero más allá del ámbito laboral.
Qué valora el nuevo viajero
“Algunos de los beneficios más solicitados por este perfil incluyen desayuno buffet, internet de alta velocidad, gimnasio, piscina, espacios de coworking y programas de lealtad como lo es Marriott Bonvoy”, señala Camila Rivera, Gerente Corporativa de Ventas Grupos & Cuentas Comerciales de INTURSA Grupo Hotelero. Además, agrega que el servicio personalizado y la posibilidad de diseñar experiencias locales se ha vuelto un diferenciador clave para quienes buscan optimizar su tiempo libre sin perder eficiencia durante el día.
Otra característica del bleisure traveler es que suele reservar principalmente a través de convenios corporativos exclusivos y acotados a las necesidades de su empresa, y en una menor medida mediante intermediarios especializados y programas de lealtad, lo que muestra una relación de confianza entre las empresas y los hoteles, que a su vez adaptan su oferta para fidelizar a este tipo de huésped.
Una tendencia con impacto y propósito
Para Rivera, el bleisure representa no solo una oportunidad para el sector hotelero, sino también una plataforma para fortalecer valores como la sostenibilidad, la personalización y el bienestar. “En respuesta a nueva demanda Bleisure nos proyectamos a elaborar y ofrecer paquetes integrales que combinen por ejemplo, upgrades de habitación, acceso a spas con experiencias gastronómicas y recorridos artísticos-culturales en la ciudad”, puntualizó.
La tendencia es clara: viajar por trabajo ya no significa desconectarse de uno mismo. Hoy, se viaja para lograr alta productividad, pero también para disfrutar. Y Lima, con su oferta urbana, cultural y gastronómica, se posiciona como un destino ideal para vivir el equilibrio entre agenda y experiencia.